Angina de Pecho
La angina de pecho se define como el dolor, opresión o incomodidad en el pecho por debajo del esternón que se desencadena más frecuentemente durante la actividad física y/o durante momentos muy estresantes.
¿Hay diferentes tipos de anginas?
La angina se clasifica según el factor precipitante y la duración de los síntomas. Cuando el dolor sucede únicamente secundario a esfuerzo físico, y se mantiene estable durante algunos minutos (habitualmente entre 5 y 15min), se denomina angina estable. Si el dolor ocurre durante el reposo, aumenta su duración o el número de veces que ocurre al día o a la semana pasa a llamarse angina inestable. En caso de que el dolor permanezca sin interrupción (al menos 20 minutos) y se documente daño a las células del corazón (medido con exámenes de sangre) se establece el diagnóstico de infarto de miocardio.
¿Cómo se desencadena una angina de pecho?
La causa de angina es un desbalance entre las necesidades de oxígeno del músculo cardíaco y la disponibilidad de este. En la mayoría de las ocasiones, una placa ateroesclerótica (un depósito de grasa por dentro de los vasos sanguíneos) dificulta el adecuado suministro de sangre a una región específica del corazón. Existen otras causas responsables de angina como enfermedades de las válvulas cardiacas y miocardiopatías, pero no son tan habituales a comparación de la ateroesclerosis.
Es habitual que los pacientes que desarrollan angina de pecho, ya tengan algún diagnóstico cardiovascular, como hipertensión arterial, diabetes mellitus, insuficiencia cardiaca o infartos previos, e incluso enfermedad pulmonar obstructiva crónica (mejor conocida como EPOC).
¿Cuáles son sus síntomas?
- Dolor (o molestia) por lo general opresivo que puede irradiarse (pasarse) a ambos brazos, cuello, mandíbula, espalda y abdomen.
- Se desencadena con el esfuerzo físico o algún estrés emocional.
- Se alivia con el reposo o con isosorbide.
- Se puede acompañar de falta de aire (más frecuente), náusea, sudoración y mareo.
En pacientes de la tercera edad, la presentación puede ser más inespecífica y difícil de identificar.
¿Cómo se realiza el diagnóstico?
Habitualmente, se limita a ser clínico, ya que por lo general no presenta cambios en el Electrocardiograma y los estudios de laboratorio suelen ser normales. El médico realiza una probabilidad de presentar la enfermedad que consta en valorar la edad (mientras más años, más riesgo), sexo (masculino mayor riesgo) características del dolor (si es típico es más riesgo) y recientemente la presencia de falta de aire. Con esto, puede estimarse el riesgo cardiovascular y después solicitar más estudios de imagen o de función cardiaca para confirmar el diagnóstico.
¿Qué pronóstico tiene un individuo con angina de pecho?
Aunque la angina no deja secuelas permanentes en el corazón, se ha demostrado que eventos de angina predisponen a un evento mayor como un infarto; además, disminuye sustancialmente la calidad de vida. A pesar de parecer lógico, se ha logrado comprobar científicamente que entre mayor cantidad de eventos de angina tiene una persona, más probable es que desarrolle un infarto. Por lo tanto, es preciso el tratamiento adecuado.
¿Cómo se trata?
El tratamiento es con medicamentos de inicio, aunque en individuos con alto riesgo de infarto o muerte por causas cardiovasculares, se ha documentado que el cateterismo cardiaco es una buena opción.
Las recomendaciones de cambios del estilo de vida complementan el tratamiento y son de igual importancia. A todo paciente se le recomienda el cese del tabaquismo, a adoptar una dieta rica en vegetales y pobre en grasas y colesterol, disminuir el consumo de sal y actividad física, con la finalidad de reducir de peso de ser necesario.
Fuente:
Kloner, R. A., & Chaitman, B. (2016). Angina and Its Management. Journal of Cardiovascular Pharmacology and Therapeutics, 22(3), 199–209.
McPhee, S. & Hammer, G.D (2010). Fisiopatología de la enfermedad. McGraw-Hill. 275-278.